Cuando brota el murmullo de las aguas
en el caño de ausencias de otros tiempos,
repleto de presencias en la charca,
esparce su tonada por la sierra
y el parque se adormece lentamente
absorto en el clamor del agua dulce.
El verde oscurecido de los pinos,
libando ese dulzor de primavera,
se bebe los delirios en sus copas
insomne en el perfil tierno del agua.
Y dicen los jardines que es verano,
la rueda del verdor en los rosales.
El agua cristalina se derrama
mojando el arrebol de mis mejillas.
Hola Encarna,un placer visitar de nuevo tu blog. Precioso el poema, además de sencilla y sentida toda tu prosa.Un abrazo.
ResponderEliminarMª Rosa.
Hola Encarna, me encantan tus poemas...Te felicito!!..Besos desde Argentina...Any
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