Esta es mi nueva Antología SARIS DE SEDA, REALIDADES DESVELADAS. Versa sobre la vida de las mujeres en la India, para lo cual yo he escrito un poema dedicado a esas mujeres. Os lo muestro a continuación de la noticia. Está editado por la Diputación de Jaén y fue presentado, con una exposición de fotografías de varios autores, en el Centro Cultural Baños Árabes de Jaén. Gracias a los participantes, a los asistentes al acto, a los colaboradores y a todos los que lo han hecho posible.
LAS
NIÑAS ABANDONADAS EN LA INDIA
¿Qué haces, querida niña? ¿Qué haces, mi
linda nena?
Estoy tendiendo mi sari de niña pobre, de
niña sola,
mi sari de chiquilla abandonada a los
desmadres del tiempo,
mi sari de desamor y engaño, sari de
desesperanza
que yo quiero transformar en un sendero a
la vida en libertad,
a la justicia, a la paz, al amor y a la
hermandad.
Mis padres no me querían, mis padres me
abandonaron.
¿Por qué lo harían? Me pregunto cada día
con el corazón sangrando.
¿Por qué no me retuvieron en el hogar como
a mis otros hermanos?
Quizá porque mi sexo es interno, porque
sería apetito y deseo de los varones,
porque podía concebir, abrir mi cuerpo a
la vida y a los crespones del tiempo.
Acaso una chica vale menos que un muchacho.
Sé que todo es diferente entre un hombre y una dama,
pero nosotras, las niñas, podemos ser tan valiosas
como el sol que nos alumbra
con sus rayos poderosos, podemos lanzar calor en todas
las direcciones,
podemos mover el viento con trayectoria benigna y ser
un día esplendoroso
en todos los calendarios de este mundo y a la orilla
de los versos,
podemos ser un poema con rimas de miel y azúcar, de
sonrisas y arrumacos,
de caracoles y sueños. Podemos ser esa luna que brilla
en lo alto de los cielos,
para alumbrar nuestras noches, para alimentar amores y
proyectos de futuro,
para ver el firmamento y detestar sinsabores, ser
placidez y dulzura,
cristales blancos del firmamento, rostro bello mirándose
en los reflejos
de ese mar de caracolas y espumas, de caballitos y
olas.
También podríamos ser estrellas brillando en el firmamento,
calibrando sus mil brillos en las terrazas del aire.
Ser estrella de los vientos con sus puntos cardinales
en las cuatro direcciones.
Luceros parpadeantes que hacen cien guiños al mundo.
Las mujeres tenemos alma, corazón y mente, sentimientos
y esperanzas
Quizá tus progenitores, pequeña, nunca pudieron criarte.
Quizá les faltaba aliento para acunarte en sus brazos
para sanar tus heridas.
Para cogerte la mano y llevarte por las calles con la
cabeza bien alta.
Las mujeres de la India alzan su voz a los vientos y
no las escucha nadie.
De pequeñas, son abandonadas como si fueran tortura y
desolación,
como si fueran herida mortal que hará sangrar la
familia,
pero en realidad, quienes sangran son las nenas
abandonadas.
Las niñas indias han de labrarse un futuro ellas solas
a costa de sacrificios
en esos orfelinatos a los que las condena el destino cruel
del mundo.
Van siempre a la deriva del tiempo hostil que las ha
desprotegido,
que las ha condenado al silencio de los proscritos.
A pesar de todo esto, ellas desean ser golondrinas y
volar
por el ancho cielo al socaire de los vientos,
ser palomas mensajeras de esperanza,
cubiertas por lindos saris de seda, como si fueran sus
alas
para volar por el espacio infinito con unas plumas tan
blancas
como la nieve, decoradas con bellas flores de pétalos
escarlata,
¿Qué haces hermosa niña entre colores y sedas?
¿Entre rojos y azulados, entre amarillos y verdes?
¿Tiendes tu sari de amor para que el aire lo abrace?
No sufras más niña mía, llegará el día en que las
mujeres,
de tu país y del mundo, puedan encarar el destino,
frente a frente,
Y subir a las estrellas, todas juntas, de la mano,
para acariciar la luna y mirarse en los espejos del
viento,
para dirigir a buen puerto el velero de su existencia
vital.
Y no sufrir nunca más un destino tan adverso.
http://trabajosdeencarna.blogspot.com Escrito el 12-marzo
-2025





No hay comentarios:
Publicar un comentario