Este es el artículo de mi autoría
publicado en el periódico IDEAL SIERRA MÁGINA, para el mes de septiembre de
2023. Abajo lo cuelgo en letra grande para que podáis leerlo.
LA
VUELTA AL COLE EN SEPTIEMBRE PALABRAS 514
Una
vez pasado el caluroso verano, los días festivos y los festejos de cada
localidad, vividos a tope por la población infantil, con atracciones de feria,
con recorridos de gigantes y cabezudos, acompañados de ritmos alegres en ese
divertido jolgorio, en el cual estos eventos se envuelven, todo llega a su fin.
Después
de los encuentros familiares, de los juegos realizados con los amigos del
propio pueblo o de los que vienen de fuera, es preciso hacer el cambio. Después
de haber pasado muchos días con los abuelos, esos seres maravillosos para los
niños, porque son unas personas amadas que lo dan todo por ellos, y se hacen cómplices
suyos en cualquier actividad que emprendan, ya que son unos cuidadores más
tolerantes que los propios padres, porque les suelen dar muchos caprichos, que
en casa les están prohibidos, y contactan con ellos como si se tratase de otros
amigos, es necesario pasar página. Después de haber vivido toda esta clase de
experiencias positivas y gratificantes, la población infantil tiene que volver
a clase.
Esta
etapa veraniega es muy importante para los niños y niñas porque les deja un
poso agradable en el corazón y unos recuerdos inolvidables. A lo largo de su
vida, irán evocando estas épocas con nostalgia y, en algunos momentos,
anhelarán volver a vivirlas. Por esta causa, los mayores tenemos que procurar
que este período de relax sea agradable para todos ellos y les saquen el máximo
rendimiento. Ya que estas experiencias formarán parte de su personalidad en el
futuro.
En
junio, después de las fiestas escolares, consistentes en bailes, obritas de
teatro y otras acciones lúdicas como colofón final a una época de actividad
escolar intensiva, los alumnos dejan un trabajo complicado, hecho con una
metodología rigurosa que les ha exigido esfuerzo y entrega. Es bueno que se
relajen en verano y disfruten de la época estival. Si tienen que realizar
actividades escolares, estas no deben ser complicadas ni demasiado persistentes
en el tiempo, con objeto de que no les creen traumas ni les resten mucho tiempo
a la diversión ni al jolgorio ni a las nuevas vivencias de estío, de las cuales
también aprenden bastante y extraen unas experiencias magníficas y positivas
que recordarán con añoranza durante todo el curso y les van a ayudar el resto
de su vida.
Los
primeros días de clase deben ser relajantes y los niños pueden contar
verbalmente o por escrito sus experiencias veraniegas. Los docentes deben hacer
sondeos para ver los conocimientos que ha retenido u olvidado cada cual, en
esta época veraniega, porque no toda la población infantil realiza las mismas
actividades. Con estos sondeos, los maestros tendrán una buena información sobre
lo que sabe el alumnado, con objeto de reiniciar el aprendizaje con un repaso
general de los contenidos del curso anterior, antes de comenzar con los
contenidos del curso actual. Apoyemos todos a nuestros niños y a nuestros
adolescentes, porque ellos son los que nos gobernarán el día de mañana y los
profesionales en todos los órdenes de la vida.
¡Apostemos por la infancia y por nuestros jóvenes estudiantes ¡
Encarna
Gómez Valenzuela. http://trabajosdeencarna.blogspot.com
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