Se han cumplido catorce años de la muerte de Carmen
Martín Gaite. La autora de El cuarto de atrás o Nubosidad
variable murió antes de recibir muchos de los reconocimientos oficiales que
merecía —le llegaron, eso sí, el Príncipe de Asturias en 1988, y el Nacional de
las Letras en 1994—, pero ha logrado eso que el tópico dicta, y que emociona
cuando se palpa de verdad: perdurar en la memoria de los lectores.
Catorce años después de su muerte continuamos leyendo,
con el mismo entusiasmo, a Carmen Martín Gaite: Entre visillos ha ganado
en modernidad, y más si al leerlo recordamos la época en la que se escribió y
publicó, e incursiones ensayísticas como sus Usos amorosos de la postguerra
española.
Una muestra de
esta vigencia es Un lugar llamado Carmen Martín Gaite, publicado
por Siruela con edición de José Teruel y Carmen Valcárcel. El volumen recoge
las conclusiones de unas jornadas de estudio sobre la escritura, celebradas
entre el 24 y el 26 de abril de 2013, con la participación de críticos como
José-Carlos Mainer, Ángeles Encinar o José María Pozuelo Yvancos, además de
autores como Carme Riera, Belén Gopegui, Manuel Longares o Rafael Chirbes.
En octubre de 1963, cuando Luis Martín-Santos acaba de
leer Ritmo lento, escribe lo siguiente en la dedicatoria de su ejemplar
de Tiempo de silencio: para Carmen Martín Gaite con la admiración
sincera que me inspira su existencia compleja y polivante. Esas distintas
visiones de la escritora salmantina quedan reflejadas en Un lugar llamado
Carmen Martín Gaite: desde la que vivió la España de 1950, escribiendo
sus primeras novelas a escondidas de su marido, a la que convertida en una
mujer de letras, ya independiente, instalada en la universidad norteamericana,
donde hoy es lectura de referencia.
Los amantes de la obra de Carmen Martín Gaite
disfrutarán perdiéndose en este lugar que abarca el
descubrimiento y el recuerdo, el análisis riguroso y la lectura más creativa.
Quienes desconozcan su obra o quienes sepan poco de ella se iluminarán con una
figura, la de Carmen Martín Gaite, fundamental en nuestra literatura
reciente como modelo creativo y por su calado vital.
Noticia publicada en Estandarte.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario