Esta es la plataforma
que han colocado dentro de la Charca de Pegalajar. Dicen que es un
embarcadero flotante. Sería efectivo si la Charca tuviera agua, pero
desgraciadamente no tiene. La Fuente de la Reja se ha secado y ha dejado de
derramar el líquido elemento en la Charca. Otro problema es que no hay barcas. Las
que teníamos alguien las maltrató y quedaron destrozadas. Eso se soluciona
adquiriendo otras, si hubiera fondos para hacerlo.
En las obras no hay medidas de seguridad. Uno
grupo de niños, ayer por la tarde,
jugaba dentro de la Charca, alrededor del embarcadero flotante, que ahora reposa
en el pavimento de la misma, si sucede algún accidente, habría que buscar
responsables.
Otro hecho lamentable es que han llenado los
hipotéticos jardines, con forma inclinada, de tierra y pedruscos, sin poner plantas y la población
infantil la desparrama por doquier y lanza los pedruscos afuera, como un
divertido juego que lo ensucia todo. Si hubiera una tormenta se llenaría la calle de tierra, barro y piedras por la inclinación de los supuestos jardines, que en su día esperamos queden decentes y más o menos decorativos.
Y por último lo más asombroso de todo es que los árboles del
parque se encuentran en pésimas condiciones, tienen sus hojas mustias y de
color ocre. Da pena mirarlos, con lo frondosos y verdes que han estado siempre.
Nadie se ocupa de regarlos, a pesar de
que han sufrido la sequía de este calurosísimo verano, el corte de raíces y el
polvo y las molestias de unas largas obras. Rogamos que alguien se ocupe de ellos, porque
ningún paisano desea que los árboles se
sequen. Ofrecemos algunas fotos de las obras de los parques de Pegalajar.
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